viernes, 26 de julio de 2013

El Llanero Vindicador


Fui al cine esta semana a ver El Llanero Solitario. Recordé viejos tiempos con esa película. Y me llamó la atención un hecho: Ambos protagonistas, John Reid y el Indio "Toro", buscan en la historia reivindicarse de alguna manera.

Primero Toro. Él fue seducido cuando era niño a mostrar el origen de la plata en tierras indias a cambio de un reloj. Eso trajo muerte y destrucción a su tribu, porque la avaricia de esos hombres blancos por la plata, hizo que los eliminaran. Toro se propuso encontrar a esos hombres y hacer lo que fuese necesario para reivindicarse con su pueblo.

Por otro lado, John recién ha vuelto a su tierra natal y sin planearlo hereda el puesto y la misión de su hermano. Inicialmente se resiste, pero luego, después que Toro le cuenta cómo Buch Cavendish asesinó a su hermano y luego le sacó el corazón y se lo comió, decide asumir su rol como Ranger y reivindicarlo. Y la trama transcurre de esa manera, ambos personajes buscando sanar algo ocurrido en el pasado.

Pensaba en los hechos que nos marcan la vida. Quizá algo que pasó en la niñez y que hemos cargado por años, quizá un daño que alguien más causó, quizá incluso podemos sentir que alguien tomó nuestro corazón (como en la película), quizá se trata de una injusticia, hasta puede ser que sintamos que Dios no apareció cuando lo necesitábamos.

Pero, que bueno es saber que Dios si escucha, que si conoce los hechos tal y como ocurrieron, que no ha olvidado ni un segundo lo que sufrimos. Es parte de Su naturaleza ser justo, y por algo la Biblia dice: "No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor." (Romanos 12:19 RV60). 

Puede que sintamos que Dios a veces se tarda para hacernos justicia, para tomar cartas en el asunto y hacerle pagar a los "malos" lo que nos hicieron. Pero no importa cuánto tiempo haya pasado, Él no lo ha olvidado, y tu honor será resguardado. 

En lo personal he querido desquitarme de una o dos personas, me he descubierto teniendo deseos no tan buenos para esas personas (lo confieso!). Pero he aprendido que arruinaría mi vindicación si meto mis manos. Esa no es la forma de sentirme compensada, eso es venganza. Lo que realmente debo hacer es confiar en que Dios es quien da la cara por mí y dejar que Él trate con ellos. Y me queda claro que no va a ser ni en el tiempo ni en la forma que yo quiera (así que no creo verlos nunca de rodillas pidiéndome perdón!!). Y también he tenido que aceptar que muy probablemente mis ojos nunca verán la forma en que Dios lo haga. Eso es asunto Suyo. 

El indio "Toro" esperó 20 años para reivindicarse con su tribu. Espero que Dios no se tarde tanto conmigo, pero sé que su reivindicación llegará. Sería extraordinario tener al Llanero Solitario para que se desquite por mí. Pero tengo a Dios, soy Su hija, y como buen Papá hará lo que sea para traer reivindicación a mi vida. Estoy segura de eso.

"Y Raquel dijo: Dios me ha juzgado y me ha vindicado, y ha escuchado mi plegaria" (Génesis 30:6 Amplified Version. Traducción personal)







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